La noche del 5 de Julio un reducido grupo de amantes del Stoner y psicodelia, nos reunimos en el Wurlitzer Ball Room para tener el gran placer de disfrutar de estas dos grandes bandas. Un concierto íntimo, pero a la vez alucinante fue lo que nos ofrecieron ambas bandas.
Como comienzo, subió al escenario la banda local Krazark. Quien se encargó de calentar el ambiente con un set corto, pero directo a la yugular con temas como “Keep Your Fire Alive”, “No Pride”, “Nothing Lasts Forever” o “Southern Metal Fest”. Derrochando energía y buen rollo.
Así mismo y aprovechando que presentaban un nuevo tema llamado “Leave It All Behind”, un tema que se me antoja con ciertos guiños vocales y líricos a Jim Morrison, Esteban presentó al nuevo miembro de la banda Andrés Sosa quien pasa a hacerse cargo del bajo y con el que han escrito dicho tema.
Decir que los miembros de Krazark se dejan la piel en cada bolo es quedarse corto. Con su sonido Stoner demoledor y una puesta en escena muy bien llevada. Krazark es una banda que debería tener un mayor puesto dentro de la escena Stoner Española. Pero el movimiento musical es lo que tiene. Es muy difícil de abrirse camino en los mercados y económicamente demanda muchos sacrificios por parte de los músicos. Y en España la situación se complica aún más.
Luego de tan buen abreboca fue el turno de Jeremy Irons and the Ratgang Malibus (JIRM) banda originaria de Stockholmo y que lleva años dando la vuelta por Europa dando conciertos, pero que por alguna extraña razón no terminan de cuajar dentro de la escena. Luego de verlos y escucharlos, me sorprende que no sean más grandes.
Si Krazark se dejó la piel. Estos suecos se dejaron también el alma en escena. Con un sonido a ratos reminiscente de Grand Funk, otros a Black Sabbath e incluso algún guiño a bandas más contemporáneas dentro del género del Stoner y psicodelia como podría ser Vintage Caravan. Un sonido brutal y muy lisérgico inundó la sala desde el primer segundo. No dejando indiferente a ninguno de los asistentes que allí nos encontrábamos. Tocaron canciones de varios de sus discos, incluyendo varias de su más reciente disco como las épicas “Digs”, “Nature of the Damned” y terminando su set con la monumental “Tombs Arise” en la que dieron rienda suelta a una serie de improvisaciones al más puro estilo “noise”.
Si bien el sonido estaba un tanto descompensado en ambas bandas por las características del local, el P.A. y lo descomunal del volumen de los amplis de guitarra el concierto fue muy disfrutable y recomiendo a los que tengan la oportunidad de ver a estas bandas, no se lo piensen ni un segundo. Un show más que recomendable por lo interesante de la propuesta.
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