GRAPESHOT + EVIL IMPULSE. 13/11/2021. Sala Gruta 77 (Madrid)

¡Qué ganas había ya! Por fin, tras casi 2 años de hastío, iba a asistir a un concierto de metal sin la odiosa restricción de tener que permanecer sentado durante el mismo. Además no era un concierto cualquiera: Evil Impulse y Grapeshot unían fuerzas para deleite de los más de 100 amantes del groove, stoner, thrash, southern… metal en definitiva, que nos dimos cita en la meca del underground madrileño; la emblemática sala Gruta 77, que colgó el cartel de “ no hay entradas” en la puerta. En los aledaños de la sala, reencuentros, hermandad, abrazos; dentro de ella, dos bandazas, sonidaco, precios asequibles y amabilidad en el trato. El resultado de todo ello fue una velada inolvidable.

Entramos al local mascarilla en ristre tras ser informados de las medidas preventivas anticovid pertinentes y pudimos así comprobar in situ como Gruta 77 desprende ese aroma rancio pero sumamente agradable a esencia underground; una sala que respira metal por los cuatro costados y que esta noche iba a recibir su dosis vital por partida doble.

EVIL IMPULSE

Flotaba la expectación en el ambiente por ver a los manchegos sobre las tablas ya que se presentaban en Madrid con varias novedades importantes para la banda: presentaban nuevo disco, gestado y editado durante el confinamiento de la pandemia (“The Brotherhood”); volvía a sentarse tras el kit de la batería Rodrigo De Lucas (uno de los mejores bateras de este puto país) y veríamos subirse por primera vez a un escenario con Evil Impulse a su nuevo guitarrista, Jesús (también en Die II Reborn y Stillnes).

Toño (voz), Víctor (guitarra), Pedro (bajo) y los mencionados Rodri y Jesús, confeccionaron un set list  cafre a conciencia, ideal para volar cabezas a base de brutalidad sonora y mala baba; y así llegó hasta nosotros, como ellos pretendían, como una salvajada de bolo.

De repente, a modo de intro, se escuchó la voz del Fary hablando en una entrevista sobre “La Mandanga”, ese “melocotonazo” de tema del pequeño gran artista… y, tras esto, ahí ya se acabaron las risas. Evil Impulse había ido tomando posiciones sobre el pequeño escenario del Gruta y nos reventarían con el corte que abre su último disco, esa andanada que es “Son of the devil”, que enlazaron con “Uppercut”, dejando claro que “The Brotherhood” iba a tener mucho peso en el set list. Primera alusión a discos anteriores con “Valley of silence”, uno de los mejores temas de su “The unbroken ritual” (2017) y, tras ello, la canción que abría y daba título a su lanzamiento del 2015: “Who´s gonna kill who?”, una bestialidad de tema que provocó entre el público que se agolpaba delante del escenario los primeros pogos.

El sonidazo potente y nítido que gozaron ayudaba a disfrutar de toda la intensidad de “To all my enemies” o del emblemático “Ancient Paradox”, con Toño constantemente incitando al respetable a no parar de saltar y sudar junto a él mientras la banda sonaba en plan apisonadora, sólida y muy compacta; lo cual tiene mucho mérito teniendo en cuenta que presentaban nueva formación en una plaza tan fuerte como es Madrid; pero Evil Impulse no es un grupo que se amedrente ante ningún reto: Pedro y Rodri forman una base rítmica apabullante y la compenetración de Víctor con Jesús era evidente formando un muro sónico a base de riffs que tiraba de espaldas, con constantes muestras de complicidad y buen rollo; sinergia guitarrística que le da al sonido Evil, especialmente en los solos, un nuevo aire muy interesante que me encantó.

Llegaba la hora de regalar al público una versión (o “cover” como diría Toño). Lo fácil habría sido tirar de “Even Flow” (Pearl Jam), incluida en su “The Brotherhood”, pero el elegido fue un clasicazo del metal setentero como es “Sabbath bloody sabbath” que desprende un magnetismo que te hechiza irremediablemente. Por supuesto, sabia decisión, homenajear honestamente a los padres del heavy y que, obviando algún que otro pequeño desajuste en los cambios de ritmo, les quedó de lujo.

Era el turno de uno de los mejores temas de su último disco, esa joya  llamada “Chained Shadow”, para posteriormente irnos encaminando hacia el final del show con un tándem brutal (“When the killers” y “Everlasting”) que provocó constantes pogos entre el público.

Tras una breve pausa para que cogiéramos aire nos atacaron con la cañera “Lone Wolf” (increíble la dimensión que el da a esta canción Rodri a base de blast beats infernales, demostrando un dominio de la batería al alcance de muy pocos en este país) y dejando para el postre “The end of the road” del ya lejano en el tiempo “Flames from the ground”(2013) y que es el tema con el que un servidor descubrió a la banda por lo que le tengo especial cariño.

Esta noche, Evil Impulse fue 100% actitud, carisma y contundencia en un espectacular bolo con el que se quitaron una molesta espina que duraba ya 2 años. Enhorabuena!!!  Grandes!!

SET LIST 

-Son of the devil

-Uppercut

-Valley of silence

-Who´s gonna kill who?

-To all my enemies

-Ancient Paradox

-Sabbath bloody sabbath (Black Sabbath cover)

-Chained shadow

-When the killers

Everlasting

-Lone wolf

-The end of the road

GRAPESHOT

La amalgama de estilos de los que beben hace de Grapeshot una banda inclasificable, pero lo que está claro es que los barbudos madrileños son una banda de raza groove southern metal, visceral y pantanoso, en el que te vas hundiendo hasta quedar irremediablemente atrapado.

Jugaban en casa y sabían de las ganas que había de disfrutar de su reciente “Suckcess” en directo. Los ingredientes para una gran noche estaban sobre la mesa y ellos supieron transformarlos en un bolazo de órdago, sin altibajos (el cénit del concierto fue el concierto entero en sí), disfrutando (al igual que pasó con Evil Impulse) de un gran sonido: será por la imponente PA que dispone la sala o por los paneles estratégicamente distribuidos colgando del techo para absorber harmónicos y reverb; no sé, pero Gruta 77 suena con la pertinente contundencia y la necesaria nitidez, aspecto esencial para poder gozar en todo su esplendor de cualquier show en directo.

Esteban (voz), Jose (guitarra), Borja (anteriormente al bajo, ahora guitarra rítmica), Marcos (batería) y el nuevo bajista Miguel, tomaron posiciones mientras sonaba la B.S.O. de Fargo  a modo de intro. Ya hemos comentado que presentaban nuevo disco (“Suckcess”) el cual destriparon en su totalidad, intercalando hasta 6 temas de su anterior trabajo “All about to end” (2017) para conformar un entramado de 15 trallazos, más de una hora de Grapeshot, que dejó a los fans más acérrimos del grupo más que satisfechos y con una gran sonrisa en sus sudorosas caras.

El pistoletazo de salida le correspondió a “Walk in sand”, que se vio lastrada por un fallo en el micro de la caja de la batería de Marcos. Una vez solucionado el problema, el concierto cogió una alucinante velocidad de crucero que ya no abandonaría hasta finalizar el mismo. La rockera y contundente “Out of my hands”, con su excelente y molón estribillo, no desentonó para nada con las cañeras “Naked emperor” y “Hamster Wheel” de su “All about to end”; mientras “Right on” con su cadencia stoner nos mostraba a unos Grapeshot compactos y perfectamente engrasados. La salvaje garganta de Esteban soportaba increíblemente bien los vocalmente tan exigentes temas que estaban descargando, y con su imponente presencia escénica agarrado a ese pie de micro confeccionado a base de latas de cerveza, no me imagino mejor maestro de ceremonias; Borja se ha adaptado de lujo a las 6 cuerdas, acoplándose como un guante al carismático Jose (que soleó con sumo gusto toda la noche) y repartieron riffardos de guitarra por doquier mientras las poderosas líneas de bajo nos golpeaban en el pecho. Y qué decir de Marcos, toda una bestia parda tras los parches, con una pegada brutal, pero también con una técnica exquisita como demostró (por ejemplo) en “Mornig Rally”: el típico tema ideal para que el batería se pierda en directo con sus constantes cambios de ritmo y a todo trapo y se convierta en un caos; pues bien, Marcos De la Calle lo bordó…Enorme!!

En la parte central del bolo le dieron merecido chance a su “All about to end” con “Calumet”, “Johnny” (una de mis preferidas) y “Parasites” (con esas líneas vocales en sus estrofas tan System of a Down que me encantan), colándose entre ellas uno de los mejores temas de su “Suckcess”: “Cold hustler”. Comentar que cortes de su último disco que no me llaman especialmente la atención, en vivo ganan muchísimos enteros y se convierten en verdaderos trallazos, como “Beholder”(inconmensurable Marcos reventando la batería) o “We´ll return” que interpretaron con un gusto alucinante y les quedó de lujo.

Mención aparte para “All In”, uno de los cortes más emblemáticos de Grapeshot que en directo siempre supone una verdadera inyección de adrenalina y en el que Miguel ya no se aguantó más y acabó (bajo en ristre) surfeando por encima del público (ya nos había avisado Esteban que Miguel es de los que se vienen arriba).

El perfecto colofón para el show fue esa macarrada speedica y gamberra que es “A hostias”, que terminó por dejar exhaustos a banda y público.

Gran noche la vivida el sábado 13 de noviembre en la madrileña Gruta 77 con dos de los mejores grupos del underground estatal, llamados a ser mucho más grandes de lo que son más pronto que tarde. Ya les toca y se lo merecen de sobra.

SET LIST

-Walk in sand

-Out of my hands

-Naked emperor

-Hamster Wheel

-Right on

-Morning Rally

-Parricide

-Johnny

-Cold hustler

-Parasites

-Calumet

-Beholder

-All In

-We´ll return

-A hostias

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