Lionheart + Eternal Psycho: Krater Rock City, Puertollano

Interesantísima velada, con inicio de la misma diurno, la que nos tenían preparada nuestros amigos David y Mary del Krater de Puertollano este pasado domingo 22. Este era el día en el que unas leyendas del hard rock británico llamados Lionheart pisaban por primera vez en su dilatada historia tierras manchegas.

Antes, y aún de día, los madrileños Eternal Psycho fueron los encargados de dar el pistoletazo de salida a tan magno evento. Anono se posicionó tras el kit de batería y, ante él, Tomy con su bajo. A su izquierda el guitarrista Jorge y a su derecha, también a las seis cuerdas, Lucky. Ya sonaba “Typical of me” cuando irrumpió en escena de manera arrolladora su cantante Bea, enfundada en cuero negro y con una contagiosa energía vital: todo un torbellino de frontwoman. Para “Dirty System” ya nos habían dejado bien claro cómo se las gastaban: contundente metal con tintes industriales que suavizaba la bonita voz de Bea pero que endurecía Lucky con sus logrados guturales.

La sala presentaba buen aspecto a pesar de la temprana hora, atípica para un concierto del Krater y el sonido era atronador… esto último que a veces es un halago en los bolos de nuestro género, es aquí un ligero reproche ya que por momentos no se podía apreciar con nitidez el buen hacer musical sobre las tablas de los madrileños por culpa de ese sonido algo saturado.

Aun así, temazos como la cañera “My Demons” o “Do you believe in yourself?” mostraban a un combo compacto y compenetrado; no en vano los miembros de Eternal Psycho pueden presumir de contar con un buen bagaje musical a sus espaldas que les da solvencia y solidez en escena. Aunque todas las miradas se concentraban en la ex Morgana Bea por su gran presencia escénica y sus movimientos, inmersa en una continua coreografía bonita y cañera, pudimos degustar una muy buena dupla de guitarristas en las personas de Jorge, destripando intensos solos, y Lucky que, además, como ya hemos comentado anteriormente, tiene gran peso específico en la voz acompañando perfectamente a Bea con sus guturales. Y no quiero dejar de señalar la contundente base rítmica que formaron el bajo de Tomy y la batería de Anono (también batería de los Burdel King de Txus de Mago de Oz).

Con “Tonight” y “See the light” pusieron fin a un corto e intenso show, despidiéndose entre los aplausos de la gente que, si bien es cierto que estaba allí para ver a Lionheart y que el estilo musical de Eternal Psycho poco tiene que ver con los ingleses, supo agradecer ( y valorar) el bolo que se acababan de marcar los de Madrid en nuestra ciudad minera.

Tras su concierto, derrochando simpatía a raudales, estuvieron haciéndose fotos y departiendo sin prisa alguna con todo el respetable. Grandes!!.

SET LIST ETERNAL PSYCHO

-Typical of me

-Dirty System

-My Demons

-Do you believe in yourself?

-Tonight

-See the light

Con puntualidad británica (a muchos les pilló fuera de la sala, en la calle) los integrantes de Lionheart se posicionaron en el escenario del Krater; al fondo del mismo un gran telón con la portada del último disco del grupo y también dibujo de la parte delantera de sus camisetas oficiales, muy vendidas ese día ya que se veían por todas partes cubriendo los torsos de numerosos asistentes. Había llegado el momento que desde hacía un par de meses anhelaban tanto los dueños de la sala como muchos feligreses asiduos al Krater; y he de decir que salió todo rodado: actitud y simpatía de la banda inmejorables, el sonido (que corrió a cargo de 6k3) nítido y potentísimo, el set list fue un compendio de joyas hard rock y la sala presentando un gran aspecto gracias a una muy buena entrada (aunque no llena).

Arrancaron con el tema que abre su “Second Nature” del año pasado: “Give me the light” sonó grandiosa, perfectamente cantada por el recién llegado al seno del grupo, el escocés Jimi Anderson (que tenía la difícil tarea de sustituir al ex Shy Lee Small) y el resto del grupo, excepto el batería Clive Edwards, haciéndole unos coros increíbles. Sin más dilación nos regalaron las dos canciones con la que arrancaba su álbum debut de 1984: el tema que daba título al Lp (“Hot Tonight”) y la gran “Wait for the night” que el gran Steve Mann se encargó de introducir con el teclado (todo un lujo este hombre tanto a la guitarra como al teclado: no me extraña que Michael Schenker lo haya reclutado para su proyecto actual).

Tras encadenar tres temas de su último disco como son “Prisoner” (con momentos de doble bombo geniales por parte de Clive Edwards) “Angels with dirty faces” (qué maravilla de coros) y “30 years” (especie de autobiografía resumen de la azarosa historia de Lionheart) llegó uno de los momentos especiales de la noche con la magistral interpretación del “Anytime” de MSG (McAuley Schenker Group) incluido en su disco de 1989 “Save Yourself”. En esa época con Robin McAuley y con el genio albino alemán de las seis cuerdas estaban en el grupo Steve Mann a la segunda guitarra y teclados y Rocky Newton al bajo y coros. y justo ambos dos se hallaban en estos momentos en Puertollano ante nuestros ojos. Por cierto, hablando del afable Rocky, gran bajista (lucía un precioso bajo que homenajeaba en su colorido a la Union Jack, bandera del Reino Unido) y mejor corista, arropando a Jimi Anderson con unos coros de un nivel altísimo.

Nueva alusión a su lejano “Hot Tonight” de 1984 con “Dangerous Game” y “Tower of Silver” para posteriormente ponernos a todos a cantar eso de “Don´t pay the Ferryman” que popularizó Chris De Burgh en los primeros años ochenta. Con la movida y bailable “Heartbeat Radio” y la homónima “Lionheart” nos encaminábamos irremediablemente hacia el final; apoteósico final de la mano del “Doctor,Doctor” de U.F.O. que puso a todo el mundo a botar y cantar sin reservas. Momentazo y perfecto colofón. Con vítores, sudor y sonrisas de oreja a oreja despedíamos a la banda mientras se escuchaba grabado el reprise de “Second Nature”, única canción que echamos en falta en el set list de Lionheart.

Y no hemos mencionado aún al señor que se adueñó del lado izquierdo del escenario (desde nuestra perspectiva, el lado derecho). Dennis Stratton se marcó un gran concierto, viéndosele disfrutar como si tuviera 20 años y estuviera tocando con unos tal Iron Maiden. Desde bien temprano esa tarde se le pudo ver en la calle, cerveza en mano, como uno más, haciéndose fotos con todo el mundo y su eterna sonrisa asomándole en el rostro.

Fue una gran noche: magníficos músicos que además derrocharon simpatía y cercanía (tanto Eternal Psycho como Lionheart), numeroso público entregado a la causa y sonidaco (como siempre que se encarga de ello Alex Ferrón y sus 6k3). Conmovía ver las lágrimas de emoción de David y Mary que, a base de trabajo y esfuerzo han puesto a Puertollano en el mapa musical nacional y al Krater dentro del circuito nacional de salas de conciertos como también lo está (por ejemplo) la sala Nana de Ciudad Real.